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El nuevo vuelo hacia la Luna: Rusia y su búsqueda de poder espacial
En un hito histórico, la nave rusa Luna-25 despega desde el puerto espacial de Vostochny, marcando el primer lanzamiento ruso hacia la Luna desde 1976, en los días de la extinta Unión Soviética. La misión está diseñada para llegar al satélite natural de la Tierra el 23 de agosto, en posibles coincidencia con el aterrizaje de una sonda india lanzada en julio pasado. La travesía hacia la Luna se espera que dure aproximadamente cinco días y medio, seguida de una órbita que podría durar entre tres y siete días antes de dirigirse a la superficie lunar.
Rusia e India compiten por ser los primeros en el polo sur lunar
En el ámbito de exploración lunar, solo tres naciones han logrado aterrizar sus sondas con éxito: la Unión Soviética, Estados Unidos y China. Sin embargo, tanto la India como Rusia tienen como objetivo ser los primeros en descender en el polo sur lunar. La agencia espacial rusa, Roscosmos, busca demostrar no solo su capacidad para transportar carga útil a la Luna, sino también garantizar su acceso a la superficie lunar. Según Vitaly Egorov, un destacado analista ruso de asuntos espaciales, esta competencia se centra en la rivalidad política entre China y Estados Unidos, así como en otros países que también aspiran al título de superpotencia espacial.
Desafíos derivados de las sanciones y la tecnología extranjera
Las sanciones impuestas a Rusia debido a su participación en la invasión a Ucrania han dificultado su acceso a la tecnología occidental, afectando su programa espacial. Según Egorov, los componentes electrónicos extranjeros son más livianos que los de fabricación local. Aunque el estudio del agua lunar podría ser una tarea de importancia científica, para Roscosmos el objetivo principal es simplemente lograr aterrizar en la Luna y recuperar los conocimientos perdidos de la época soviética, adaptándose a una nueva era de misiones espaciales.
Con información de la Agencia The Associated Press.
