«Abrimos nuestra relación este verano, tras once años juntos en una relación monógama en la que aun flirtear lo considerábamos engaño», explica Neféli. «Teníamos una base muy sólida, con una comunicación y una honradez geniales, así que sentimos que era seguro dar ese paso».
Cuando se ha estado juntos de forma monógama a lo largo de tanto tiempo como , puede resultar deprimente proponerse una estructura de relación plenamente nueva. Una persona con una relación poliamorosa puede tener más de una relación a la vez. Todas y cada una de las personas implicadas son siendo conscientes de la relación y la admiten. En dependencia de si una pareja decide abrir su relación íntima, romántica y/o emotivamente, la terminología y la jerarquía pueden mudar.
Aun aquellos que solo tienen citas monógamas, o que no tienen ninguna cita, seguramente hayan oído charlar del término no monogamia moral relacionado con el poliamor. En contraste a la monogamia no moral -o sea, el engaño o la infidelidad-, las parejas que practican la no monogamia moral son abiertas con respecto a sus parejas fuera del matrimonio y, de manera frecuente, estas relaciones pueden ser puramente sexuales. El intercambio de parejas, las relaciones abiertas y las clases de relaciones «monógamas» entran en esta categoría.
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En el poliamor, las personas pueden ser romántica, sensible o sexualmente poliamorosas y las que en un inicio eran monógamas pueden abrir su relación por cualquier número de razones.
Ashwathi, una analista de negocios de veinticinco años que vive en la ciudad de Nueva York, abrió su relación con su pareja tras 7 años de monogamia cuando se percató de que no era heterosexual. «Mi pareja y abrimos nuestra relación por vez primera en dos mil dieciocho, cuando me percaté de que deseaba explorar mi bisexualidad, algo que jamás había tenido la ocasión de hacer hasta ese instante», afirma Ashwathi. «En un inicio, era una relación abierta: solo me relacionaba con otras personas sexualmente, no románticamente».
Muchas parejas pueden decantarse por cerrar su poliamor a los vínculos románticos y sensibles. Uno de los posibles miedos al abrir la relación o el matrimonio es perder a la pareja por otra persona. Para Ashwathi y su pareja, al comienzo tenía sentido explorar las experiencias solamente sexuales, mas al final decidieron buscar asimismo las románticas.
«Tras unos años [de tener otras parejas sexuales] y de percatarme de que asimismo deseaba relaciones románticas, entendí que era poliamorosa y lo charlé con mi pareja», recuerda Ashwathi, «tras estimar nuestras opciones, decidimos abrir plenamente la relación en dos mil veintiuno. Ashwathi cita el diálogo abierto y la sinceridad como los primordiales factores que asistieron a la pareja a localizar un sólido arraigo en su poliamor.
«Si una pareja ha sido monógama a lo largo de [casi una década] y quiere abrir su relación, lo más esencial es charlar de sus respectivas razones para buscar el poliamor», explica a Allure Leanne Yau, educadora en poliamor y autora de contenidos en Poly Philia.
«Para hallar la alegría en el poliamor, las personas deben tener sus límites [como individuos]», afirma Yau. «Si bien bastante gente piensa de forma automática en los límites sexuales tratándose de relaciones abiertas, identificar los sensibles puede ser realmente útil al comienzo de salir con múltiples personas.»
Conforme Kate Manser, terapeuta profesional diplomada y creadora de Polyamory Therapy, sobre todo al comienzo, mientras que se navega por nuevos territorios e inseguridades, el exceso de comunicación es el camino a continuar.
«Tratándose de parejas afianzadas que practican el poliamor, deberán comunicar en demasía sus emociones, deSeos y necesidades a sus compañeros», afirma Manser, «si bien lleven quince años juntos y sientan que su pareja puede leerles la psique, deberán verbalizar sus emociones y solicitudes a su amorcito. La naturaleza misma de su relación cambia y muchas cosas que han estado tácitas ahora deben hacerse explícitas a fin de que los dos se comprendan lo mejor posible.»
Que una pareja halle o no la dicha en el poliamor depende de los cimientos de su relación. Una nueva estructura puede marchar mejor para quien ya tiene una relación estable y cariñosa. Abrir la relación sencillamente por la emoción -por poner un ejemplo, si te temes que os falte picante, que perdáis interés el uno en el otro o que os estéis aburriendo- es posible que no sea el mejor impulso para explorar el poliamor.
Esto me lleva a un punto importante: El poliamor no puede reparar una relación. Si una relación ya no marcha por una razón extraña, no es muy probable que la elección de explorar el poliamor dé la tirita que uno o los dos miembros de la pareja buscan. Por poner un ejemplo, si bien Neféli ya no está con su pareja, no cita la apertura de su relación como la causa de su separación.
«El poliamor no es la solución a una relación hastiada o moribunda, ni una forma de darle vida a las cosas», advierte Neféli. «No sé qué podría haber hecho de otro modo, pues siento que mi matrimonio ya estaba concluyendo de todas y cada una formas, así que no puedo ver qué fue un ‘error’ al aproximarme al poliamor y cuál fue el camino natural de esta relación en particular».
Si te estás proponiendo abrir tu relación o explorar la no monogamia moral, ten presente los próximos consejos.
1. Establezca un marco de relación.
Si eres una persona que siente que puede ponerse recelosa o insegura con parejas externas, puede ser esencial que establezcas un «marco» de relación: ¿de qué manera deseáis articular vuestra relación? Las parejas que abren su relación pueden escoger estructurarla de dos maneras: jerárquica o no jerárquicamente. Esto puede ir alén del sexo y transformarse en algo romántico o sensible.
En una relación poliamorosa jerárquica, una relación sirve de primordial con un «ancla», al paso que todas las otras relaciones fuera de ella se consideran secundarias. Ciertas personas hallan consuelo en una relación jerárquica, al paso que otras, como Ashwathi, prefieren prestar exactamente la misma atención a sus parejas. Esto incluye dar prioridad a uno mismo y a sus necesidades, con relación a las diferentes parejas.
En el poliamor no jerárquico, no hay parejas primarias ni anclas. Todos y cada uno de los miembros de la relación tienen exactamente la misma prioridad y las grandes resoluciones se toman en conjunto.
dos. Comunicarse con eficacia y establecer límites claros.
Si bien suene obvio, acá es donde los sacrificios de muchas parejas se quedan cortos, lo que puede llevar a confusión, sentimientos heridos y resquemor. Una comunicación sólida y unos límites meridianamente establecidos son la mejor forma de enfocar esa entrada inicial en el planeta del poliamor. Si aún no están habituados a charlar juntos, consideren la posibilidad de ir a terapia juntos, donde van a poder trabajar sus sentimientos en un ambiente seguro.
Pregúntate, si bien pienses que ya lo sabes, cuáles son tus límites: ¿Cuáles son tus límites? «Procura identificar cuál es tu ‘techo emocional’ [en] las nuevas relaciones», afirma Manser. «¿Deseas localizar nuevos amigos que puedan transformarse en una relación íntima o [quieres] desarrollar una conexión profunda e íntima con otra persona y enamorarte? ¿O tal vez algo intermedio?».
tres. Practique el sexo seguro y no tenga temor de charlar de salud sexual.
La salud sexual y las pruebas de infecciones de transmisión sexual son un tema esencial que cualquier persona con múltiples parejas sexuales debería sentirse cómoda hablando con todas y cada una . En dependencia de la estructura de la relación, practica charlar de tu historia sexual con tus parejas algunas veces. Aun puedes programar una cita para haceros las pruebas en conjunto, si es algo a lo que todos estáis preparados.
cuatro. Tómese su tiempo.
Si comienzas a sentir que tener citas o relaciones íntimas fuera de la estructura de una relación monógama es apabullante y te hallas reculando nuevamente a la monogamia, no pasa nada. No te pases. Si te sientes intimidado, siempre y en toda circunstancia puedes tomarte un reposo y regresar a procurarlo.
En último término, la resolución de explorar el poliamor es tuya. Solo debes comprender que el viaje no es de talla única. Tómate tu tiempo para gozar del proceso. Asegúrate de recordarte de forma regular que lo haces realmente bien y que, al fin y a la postre, tanto si eres soltero, monógamo o poliamoroso, el amor es rebosante.